Vos sabras – Martha Mercader – Norma – Primera Edición - 2001 – Blanda

**Vos sabras**: Siempre hay un tatarabuelo de donde tirar el hilo. Y, con esmero y osadía, ver desfilar voces y fantasmas de un ancestro que ha peleado y amado, a lo largo de los siglos. Así lo hace Carola, para atrás y hacia delante. Se remonta a la Noche de los Reyes de 1800 y llega a principios del siglo XXI, convertida en una anciana moderna y sana, frente a su nieto Rafael, que la escucha, en busca de un sentido, de una respuesta a su propia existencia.
Mientras la abuela le pregunta sobre Internet, el recauda los gestos del pasado y la novela crece de la mano de esa extraña y única forma de recordar, la de los transmisores, "esos proveedores de historias y personajes que avanzan hacia un horizonte móvil que nos incluye en algo mucho más que grandioso, aunque no se sepa bien que es".
El amor de una pareja suele condensar el principio de un linaje, como si sus integrantes portaran una fórmula secreta que busca adeptos a su mágica invención. Ellos son el andaluz Juan José y la niña Carolina, que le permiten a la abuela Carola, en su afan de "atesorar el pasado como quien almacena dulces", atravesar el siglo XIX, entre confluencias y ríos de sangre, de países (España, Brasil, Argentina, Uruguay) y de exilios. Y abordar el XX, en plena dictadura, donde el amor se traslada a un padre que cuenta sus días y confunde asilo con celda, hija con espera. Y entonces la abuela repite, "esas cosas ahora son como si no hubieran sido. Pero yo las viví".
De eso se trata Vos sabrás, de lo que se sabe detrás de lo que se escucha, de una posible canción de la propia vida, de un interior que porta cifra. Y por encima -o por debajo- de la violencia histórica que narra la novela, está siempre el sueño íntimo que Martha Mercader, con humor, ternura y palabras exactas conduce hasta el final, tipicamente argentino: "Y fueron felices y comieron perdices".