Historias con ladrones – Jose Gobello – Dunken – 2004 – Blanda

**Historias con ladrones**: Los relatos convocados en este volumen fueron escritos en la Prisión Nacional durante el año 1957. Los compañeros de cárcel del autor, todos ellos presos políticos, fueron los primeros en conocerlos. En la vieja Caseros había un sector de cuatro celdas relativamente pequeñas y aisladas del resto de la cárcel. Allí logró refugiarse Gobello -gracias a la bonhomía del jefe del penal-, lejos del guirigay de los pabellones, en un rincón propicio a la lectura. A ratos y casi sin proponérselo fue entonces llevando al papel hechos y cosas que -cada uno en su lengua- le narraban los internos. Algunas noches se reunía el autor con su abogado, Fernando Enrique Torres -también preso por esa fecha-, tres o cuatro detenidos políticos y el inevitable colado que llegaba desde el sector de los presos comunes. Gobello leía entonces algunos de sus cuentos, el que sabia hacerlo cantaba un tango y los demás escuchaban hasta la hora en que se terminaba el recreo y se regresaba a los pabellones.
Quienes escuchaban aquellos relatos los aplaudían, quizá por compromiso o tal vez porque algún pequeño estremecimiento les provocaban. Para que no murieran sin ver la luz, un cuñado de Gobello los retiraba subrepticia y sabiamente al regreso de sus visitas semanales.
Puestos que fueron en manos de algunos amigos o compañeros de redacción en el diario Democracia, estos generosamente resolvieron editarlos y fue así cómo al poco tiempo apareció un pequeño libro de carátula roja y negra que alcanzó a entrar en la cárcel poco antes de que el indulto del presidente Aramburu dejara a los procesados en libertad.
Han pasado desde entonces 47 años y convertidas en una rareza bibliográfica, las Historias con ladrones de Gobello siempre salen al paso del curioso pescador de las buquinerías porteñas.
El autor de Historias con ladrones cumple 85 años con la vida y no menos de 80 con la escritura. Como editor he considerado que la reedición de las Historias con ladrones puede constituir al mismo tiempo un bello obsequio y un merecido homenaje. Por ello se han impreso 85 ejemplares numerados destinados a otros tantos amigos y admiradores seleccionados entre los muchísimos que enriquecen la vida y el espíritu del autor. Esos ejemplares constituyen la presente edición.

Marcelo Héctor Oliveri Editor.
Septiembre de 2004.