**La feliz experiencia 1820-1824**: Superadas las ordalias del terrible Año XX, las Provincias Unidas entraron en un período relativamente estable cuyo modelo fue fijado por Buenos Aires. La caída de la autoridad nacional permitia a la flamante provincia porteña la promoción de sus fuentes de riqueza en un cómodo aislamiento, conducida por un reducido y lucido grupo de hacendados y comerciantes. Y este esquema fue el que se intento trasladar, con variada suerte, al resto del país. Luis Alberto Romero, profesor de Historia, relata lo ocurrido en estas tierras entre 1820 y 1824 desde tres puntos de vista: el Interior, empobrecido por las guerras de la independencia tanto como por la politica económica de la década anterior; el Litoral, escenario de una naciente actividad productiva; y Buenos Aires, protagonista y destinataria de una "feliz experiencia" que poco tiempo después se clausuraría abruptamente.
